FIESTAS DE MOROS Y CRISTIANOS DE ZÚJAR
LA MÁS ANTIGUA OBRA DE MOROS Y CRISTIANOS Y DE MAYOR CALIDAD LITERARIA QUE SE CONSERVA EN ESPAÑA. UNA ROMERÍA QUE HA HECHO DE ZÚJAR UN DESTINO TURÍSTICO QUE ATRAE CADA VEZ A MAYOR NÚMERO DE VISITANTES .
Las Fiestas de Moros, Cristianos y Diablos de Zújar son una manifestación cultural e histórica de excepcional belleza y valor patrimonial.
La Villa de Zújar es un municipio de Granada en el que la devoción a la Virgen de la Cabeza puso en marcha, hace más de cuatro siglos, una serie de manifestaciones devotas y festivas de profundo arraigo. Tanto, como para que hoy día se haya constituido en uno de los lugares del norte de Granada donde la Fiesta de Moros y Cristianos cobra mayor interés y atractivo, porque a su carácter histórico se le han ido sumando, otras manifestaciones que le otorgan máxima espectacularidad, como nuevas escuadras de moros y cristianos, tamborrada de adultos e infantil, conciertos, exhibiciones de folclore, agrupaciones de cornetas y tambores .….elementos que dan esplendor a la fiesta y sobre todo momentos de diversión y confraternización.
Estas fiestas de las que hay documentación probada desde 1611, gozan de singular belleza y atractivo turístico por muchos motivos, uno de los cuales es su Romería al Cerro Jabalcón. La romería se desarrolla en un paraje natural único, donde el ascenso adquiere un carácter festivo sin parangón. Es por esto que el último domingo de abril, Zújar se convierte en un destino romero envidiable, en el que la diversión está garantizada, tanto en el camino como en la cumbre. Allí las panorámicas son impresionantes y se puede divisar la magnitud del Negratín y el cinturón de montañas que rodean la Hoya de Baza.
La Chiquitilla, así llaman en Zújar a su patrona, es trasladada a la cima, donde se encuentra su ermita, el último domingo de abril entre sonidos de tambor, bandereos y cantos. Una vez en la cumbre se celebra la misa y los visitantes son invitados a arroz, a cargo de los oficiales o mayordomos de la Fiesta. El majestuoso Jabalcón cobra así un papel protagonista que hace de Zújar un destino romero único a nivel internacional . El otro ingrediente de mágica belleza lo constituye la propia gente que acude a despedir o recibir la procesión romera, con una indumentaria que da nombre a su fiesta, es decir de moros y cristianos.
La Virgen de la Cabeza es el eje de la celebración, de ahí que los desfiles se suceden mañana y tarde confiriendo a los mismos un carácter solemne y exótico que da paso a la histórica representación de la obra magna del género comedias de moros y cristianos . Una obra literaria anónima, escrita al estilo del siglo de oro, representada por actores voluntarios en los mismos escenarios naturales que el autor concibió. Se trata del Drama del Cautiverio y Rescate de Nuestra Señora de la Cabeza, que cuenta con tres siglos de antigüedad, siendo la más antigua obra de este tipo que se conserva sin modificación. La Hermandad de la Virgen de la Cabeza posee uno de los más antiguos manuscritos de la obra, recientemente hallado, lo que ha contribuido al aumento de acciones que promuevan el interés por el patrimonio. Tanta fue la fama de esta obra tricentenaria o de Los Papeles, como se les conoce en Zújar, que otros pueblos cercanos, utilizaron parte de sus versos para introducirlos en sus propias representaciones o bien la adoptaron, modificándola, con el fin de acoplarla a su población.
Hoy día máximas autoridades en la materia consideran la obra de Zújar como el mejor texto literario de España que se ha mantenido en el tiempo fiel a su original.
Las Fiestas de Moros Cristianos y Diablos de Zújar además son una simbiosis perfecta de lo lúdico, lo artístico y lo religioso. Festejan una devoción popular que recrea el júbilo en honor a la patrona, con todo tipo de atributos artísticos ancestrales (bandereo, desfile de soldadescas, toques de tambor, danza del saúco…) pero con un punto álgido de manifestación religiosa, la mañana en la que el pueblo entero pasa por el camarín de la Virgen de la Cabeza, en la Iglesia de la Anunciación.
El pueblo de Zújar se expresa a través de sus fiestas y en torno a ellas gira un gran afán de conservación del patrimonio para que perdure en el tiempo un legado de tantos siglos. Este objetivo común de mejora constante para que los visitantes se sientan bien acogidos se traduce en un despliegue extraordinario de medios, la mayoría gestados por personas voluntarias, muchas de ellas amparadas en promesas a la Virgen de la Cabeza, otras motivadas por la conservación de unos valores culturales, lo cierto es que Zújar avanza con paso firme gracias a un proceso de trabajo en equipo y así lo hemos constatado.
